Desafíos de las comunidades
Las comunidades de Brasil se enfrentan a numerosos desafíos, entre ellos la pérdida y degradación de los bosques, sequías extremas y episodios de lluvias torrenciales e inundaciones, incendios forestales, disputas sobre el uso y la propiedad de la tierra, y la marginación económica y política.
La pérdida y degradación de los bosques a lo largo de los años ha sido significativa, y con esta pérdida surgen otros problemas, como una mayor fragmentación de los bosques, una mayor susceptibilidad a los incendios forestales, cambios en el clima local y pérdida de biodiversidad.
Identificamos una intensificación de las sequías extremas y los episodios de fuertes lluvias en los tres sitios de estudio del proyecto, lo que agrava la vulnerabilidad de las comunidades locales, especialmente aquellas que dependen directamente de los recursos naturales para su subsistencia.
Las sequías extremas y las altas temperaturas han provocado un aumento de la frecuencia de incendios en la región de Tapajós, con impactos que van desde pérdidas agrícolas hasta problemas de salud relacionados con la exposición al humo de los incendios forestales.
Las comunidades tradicionales y los pueblos indígenas sufren marginación histórica, explotación, conflictos territoriales, dificultades económicas y pérdida de identidad cultural.
Las dificultades para acceder a servicios básicos y de calidad, como la educación y la atención médica, son factores que aumentan la vulnerabilidad sociocultural de estas poblaciones.
Fotos: Temporada de sequia extrema (arriba a la derecha). Temporada de inundaciones (abajo a la derecha).
Impactos del COVID-19 y su relación con otros desafíos
Los desastres ponen de manifiesto las vulnerabilidades existentes, y la pandemia no solo afectó negativamente la salud de las comunidades, sino que también interactuó con los riesgos y problemas sociales, económicos y ambientales preexistentes, exacerbándolos en algunos casos.
En el Quilombo de Abacatal, los principales impactos durante la pandemia de COVID-19 fueron: escasez de alimentos y dificultades económicas; desinformación y noticias falsas sobre la pandemia; y el agravamiento de vulnerabilidades preexistentes (educación, economía y sociabilidad).
En las comunidades donde trabajamos, comprendemos que la escuela buscaba ser un refugio seguro, incluso con la alteración de la dinámica escolar causada por la pandemia, que obligó a la transición de la enseñanza presencial a la remota. Fue necesario adaptarse a la nueva realidad, agravada por la falta de equipo, capacitación para su uso y limitaciones en el acceso a la tecnología e internet. El personal escolar se sentía inseguro respecto al aprendizaje a distancia, los salarios, la jubilación, etc. Los profesionales de la educación se sentían abrumados por tantas responsabilidades y numerosos roles en la escuela y en el hogar, pero buscaron reinventarse y tuvieron el coraje de continuar.
Percepciones de niños y jóvenes sobre los fenómenos meteorológicos extremos en la Amazonía
A través de la narración de cuentos, el dibujo, caminatas guiadas por la playa, la representación gráfica, la creación de historias y la producción de historietas, investigamos las percepciones de niños y jóvenes sobre los fenómenos meteorológicos extremos en la Amazonía, especialmente la grave sequía y las altas temperaturas asociadas con El Niño 2023/24, que incrementaron la inflamabilidad de la región y provocaron incendios forestales. Los niños y jóvenes registraron su comprensión de los problemas ambientales y el paisaje local: por ejemplo, el incendio forestal y la imposibilidad de pescar debido a la grave sequía.
Futuros deseados de las comunidades en relación con los incendios
Realizamos un ejercicio de visualización llamado Tres Horizontes y entrevistas con miembros de la comunidad RESEX Tapajós-Arapiuns para identificar futuros deseados en relación con los incendios forestales, los riesgos y las amenazas. Las comunidades hablaron sobre su bienestar futuro deseado, sus aspiraciones para la producción agrícola, la preparación ante pandemias y la resiliencia ante la sequía.
Descubrimos que los incendios descontrolados representan una amenaza creciente para el bienestar físico, la salud respiratoria, la producción sostenible de alimentos, la cohesión comunitaria y el territorio.
Las comunidades propusieron soluciones para el creciente riesgo de incendios destructivos, incluyendo una mayor presencia institucional y apoyo a los bomberos voluntarios, el despliegue de bomberos capacitados para asistir y monitorear incendios forestales durante la temporada seca y los períodos de sequía, y un mayor acceso a recursos para las comunidades que deseen reducir sus riesgos mediante la mecanización agrícola en lugar de quemas controladas.